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[HALLYU]HISTORIA DE LA ANIMACION COREANA HASTA FINES DE LOS ANOS ‘80

mar 16, 2009 | 1961 Hit

Historia de la animación coreana hasta fines de los años ‘80
 

Los primeros films animados en el este de Asia fueron de origen británico, habiendo sido importados a Japón a comienzos de 1914.  En 1917 apareció el primer film animado japonés, y para 1921 Japón ya había desarrollado un estudio dedicado exclusivamente a la producción de animación. Hacia 1930 la importación de películas habladas fue un auge y esto provocó, al mismo tiempo, que aumentaran drásticamente la cantidad de cines en las ciudades.

 

Como era la costumbre en aquellas épocas, los cortos de animación y noticias se proyectaban en las pantallas previo al comienzo de alguna película para que los coreanos fueran expuestos a los estilos de animación, entre los que se encontraban las producciones de Disney de aquellas épocas.

 

Finalmente, el 25 de Noviembre de 1936 surgió un artículo en el Diario Choson titulado “La Aparición de la Primera Animación Hablada de Choson, Gaeggum”, que anunciaba la realización del primer film animado coreano. El título de la película, Gaeggum, significa literalmente Sueños de un Perro y el artículo fue acompañado por una imagen de uno de sus personajes principales, un perro antropomórfico. La idea de utilizar un perro humanoide pudo haber estado inspirada en Disney y su uso de animales como personajes principales en la mayoría de sus cortos. De todas maneras, esta animación nunca fue completada. De hecho, no existen registros por escrito o historias de boca en boca indicando de que alguna vez se hubiese llevado a la pantalla grande. Sin embargo, esto prueba que la industria de la animación echó raíces en Corea desde épocas tan tempranas como la década de 1930, aunque no sería sino hasta tres décadas después que realmente lograría despegar.

 

Inmediatamente luego del fin del colonialismo japonés en Corea hubo un nuevo intento por comenzar la producción de caricaturas. Un hombre llamado Kim Yong-hwan, que había estudiado técnicas de animación en Japón y había colaborado en caricaturas de propaganda para la marina japonesa, retornó a Corea. Procedió entonces a establecer en Seúl la Compañía de Producción de Caricaturas Kim Yong-hwan. Sin embargo, su compañía estuvo condenada al fracaso en parte por la escasez luego de la guerra de celuloide y otros materiales necesarios para la industria. Por otro lado, los inversores de la época no poseían aún el suficiente interés ni comprensión sobre la animación.

 

Durante la mayor parte de las décadas del ’50 y ‘60 la importación de animación extranjera, en particular de Disney, dominó el mercado. El 13 de Junio de 1957 se estrenó en Seúl la película de Disney “Peter Pan”, demostrando ser tan popular que obtuvo una larga lista de relanzamientos. Fue justamente durante este período que los animadores coreanos comenzaron a pulir sus habilidades y aprender las técnicas para poder crear sus primeros cortos de animación. De esta manera, los animadores locales comenzaron a producir comerciales animados para la incipiente televisión. Las primeras animaciones coreanas tomaron la forma de un anuncio televisivo de Pasta Dental “Lucky”, emitida en 1956 en HLKZ-TV (hoy KBS). De todas formas, muchos consideran que el mejor comercial animado de estos años fue del director Shin Dong-heori, quien realizó un anuncio de Soju Jinro emitido en cines en Marzo de 1960. Este aviso imitó el método de los estudio Disney utilizando 24 cuadros por segundo, y tomó ventaja de la nueva técnica de pre-grabado para que el movimiento de labios de los personajes concordaran con las palabras que se fueran diciendo.

 

La mayoría de los comerciales a finales de los años ’50 y principios de los ’60 se emitían en cines porque la televisión todavía no era masiva en Corea, pero en Diciembre de 1961, KBS-TV comenzó a transmitirlos en forma frecuente y sólo dos años después, en 1963, inició la producción con el único objetivo de lanzarlos en televisión. Una gran proporción de estos anuncios referían a productos farmacéuticos. Las compañías recibían alrededor de 200,000 won por sólo un minuto de comercial, pero casi nada quedaba como ganancia real. El director Nelson Shin dijo en una entrevista para el Nº 16 de la Revista Animatoon que “estos comerciales antiguos no eran nada más que una manera de ganarse la vida y no contribuyeron en nada al desarrollo de de la industria de la animación.” Sin embargo, parece que este fue sin dudas el punto de inicio ya que artistas y camarógrafos aprendieron el arte y las habilidades técnicas requeridas para hacer una película de animación. Casi todos los que se encontraban involucrados en la realización de films animados en las siguientes dos décadas, comenzaron animando anuncios para la televisión.

 

En Abril de 1961, la animación coreana saltó de los anuncios comerciales a la narración de historias cuando Han Seong-hak, Park Yeong-il y Jeong Do-bin formaron un equipo para crear una caricatura de 35 mm a color llamada Gaemiwa Bejjangi (El Saltamontes y la Hormiga). Sin embargo el equipo no contaba con el suficiente materiañ para completar el proyecto ni con los fondos para conseguir más. Si bien el proyecto original calculaba una duración aproximada de 5 minutos, sólo pudieron dibujar 240 celdas que resultaban ser no más de 10 segundos de animación debido al poco presupuesto manejado. Por este motivo, lavaban las celdas, las dejaban secar, y luego dibujaban los siguientes 240 cuadros. Así fue que llegaron a completar la producción en unos 4 meses.

 

En Mayo de 1961 Corea experimentó un golpe de estado que dejó a la nación bajo el control de un gobierno militar. La Ley de Películas promulgada en Enero de 1962 contenía reglas estrictas y regulaciones, con las que el gobierno esperaba consolidar el número de compañías de producción quitando de en medio a las más pequeñas. Así, de las 71 compañías existentes previas a la promulgación de la Ley, sólo quedaron 16. El número continuó decreciendo y para Junio de 1963, el número total de compañías de producción en Corea había caído a sólo cuatro.

 

Una condición que afectaba severamente la industria fue el incremento de la censura. Las películas eran confiscadas o prohibidas bajo cargos de simpatizar con el comunismo y, por este motivo, los directores no podían realizar películas que tuviesen que ver con el realismo o la crítica social. Irónicamente, este incremento de la censura en los films posibilitó el desarrollo del género infantil y juvenil.

 

En 1965, el drama para niños de Kim Soo-yong “Incluso el Cielo está Triste” probó ser un éxito de taquilla vendiendo 270,000 tickets únicamente en Seúl. Desafortunadamente no quedan hoy copias o negativos de este film. Pero fue en 1967 cuando las películas para niños comenzaron a tomar gran empuje, ya que entre otras producciones, se estrenó el primer largometraje animado llamado Hong Gil-dong. Éste fue seguido pronto por la primera animación cuadro-por-cuadro titulada Heungbu y Nolbu.

 

Sin embargo, con cada nuevo estreno la audiencia decrecía. La principal razón de esto era la masificación de la televisión en blanco y negro, lo que tuvo un efecto devastador en toda la industria cinematográfica. Durante este tiempo, se exportaban para el entretenimiento de los chicos coreanos caricaturas clásicas de MGM y animación japonesa, por lo que la industria comenzó a reconocer que su audiencia estaba siendo cautivada por lo extranjero.

 

Hong Gil-dong y otras tantas películas de animación de aquel momento estaban basadas en leyendas tradicionales e historias folklóricas de manera que resultasen familiares para el público y contribuyesen así a su éxito de taquilla. La elección de temas familiares también garantizaba que los inversores se sintiesen atraídos por la producción, en vez de desconfiar de los trabajos netamente originales.

 

 

Hong Gil-dong 

Previo al estreno de Hong Gil-dong, Disney era casi la única compañía que exportaba films animados para su lanzamiento en Corea. La importación y distribución estaba a cargo de Producciones Seki, la compañía que produjo Hong Gil-dong. Al reintroducir los clásicos como Blancanieves y Peter Pan, la compañía Seki Producciones obtuvo un gran éxito comercial que la animó a sumergirse en la creación de su propia película animada.

 

En 1965, más de 200 films coreanos estaban siendo producidos mientras que el número de películas extranjeras ingresando al país era de tan sólo un tercio. La nueva ley del momento requería que algunos cines que generalmente proyectaban películas extranjeras, hiciesen lo propio con el material nacional 60 a 90 días al año. Producciones Seki, dueña de varios de esos cines, deseaba algo emocionante para proyectar en ese tiempo por gran miedo a perder una considerable cantidad de ingresos.

 

Finalmente, el 21 de Enero de 1967 se estrenó Hong Gil-dong en una serie de cines desde Seúl hasta Busan, y se mantuvo en cartel hasta el 8 de Febrero sólo para ser reestrenada más tarde, en Agosto del mismo año. El director fue Shin Dong-heon, junto a su hermano menor Shin Dong-won (creador además de la historieta “El Héroe Hong Gil-dong”). El estreno se había visto retrasado y los hermanos recibieron la orden de hacer mejoras. También hubo un clima de bastante confusión y exageración en la prensa respecto de la fecha de estreno del film, la producción del mismo y otros detalles. De todas formas, no hubo desacuerdo en cuanto a que el film gozó de un increíble éxito, llegando a vender 120,000 tickets en tan sólo 4 días.

 

 

Otras producciones

 

La primera película de cuadro-por-cuadro conocida como Heungbu y Nolbu fue lanzada en cines 6 meses después de Hong Gil-dong, el 30 de Junio de 1967. Era un impresionante film basado en el relato tradicional de dos hermanos, uno pobre pero generoso y el otro rico pero egoísta y cruel. Poseía en su producción algunas escenas con música de pansori (ópera tradicional coreana) y utilizaba además la técnica de animación de muñecos que había venido de Europa y había llegado a Japón, donde se hizo muy popular. Kang Tae-woong, el director de la película, estudió el arte de la animación cuadro-por-cuadro mientras trabajaba en una producción japonesa. Por otro lado, mientras los críticos amaron el film, la respuesta de la audiencia fue menos entusiasta y fue así que ningún otro film usaría muñecos animados hasta que Kang Tae-woong hiciese otro cuento folklórico, Kongjwi Patjwi, en 1978.

 

La película fue además proyectada especialmente en 2005 en el Archivo de Películas Coreanas (KOFA).

 

Hopi y Chadol Bawi fue la secuela de Shin Dong-heon para Hong Gil-dong, estrenada el 15 de Agosto de 1967. Sin embargo, antes del comienzo del proyecto, Shin de desasoció de Producciones Seki. Este film se convirtió en la primera animación coreana exportada jamás, siendo estrenada en Taiwán en 1969.

 

La siguiente producción de Seki, Son O-gong, posee la penosa distinción de ser el primer fracaso animado. Fue criticada por ser demasiado infantil, técnicamente inferior y pobremente editada. Su director, Han Seong-hak, no respondió a las críticas sino más bien las justificó diciendo que la baja calidad se debía al escaso tiempo de producción que les era otorgado entonces.

 

Para las vacaciones de verano de 1969, Producciones Seki preparó su propia secuela de Hong Gil-dong, titulada General Hong Gil-dong. La campaña de promoción del film declaraba que era la “verdadera” secuela para esta historia y “mucho más interesante que la original”, lo que no hacía ma´s que mostrar el sabor amargo que produjo el alejamiento de Shin Dong-heon. Este film fue dirigido por Yong Yu-su.

 

Seki continuó dominando el mercado de las películas de animación lanzando los siguientes tres films. Estos serían los últimos dibujos animados hechos en Corea hasta la aparición en cines de Robot Taekwon V en 1976.

 

El siguiente trabajo de Yong Yu-su se basó el personaje de Osamu Tezuka Tetsuwan Atom, conocido entre la audiencia occidental como “Astroboy”. Sin embargo, aunque el nombre (Lighting Atom) era similar, el diseño del personaje y la historia diferían de la producción japonesa. De todas maneras, la siguiente animación lanzada en 1972 recibió claramente una cantidad significativa de la serie japonesa Ultraman y de películas de mounstros tales cmo Godzilla o Gamera. Ésta se llamó La Guerra de los Mounstros.

 

Finalmente, entre La Guerra de los Monstruos de 1972 y el estreno de Robot Taekwon V en 1976, no se realizaron animaciones coreanas. Disney continuó exportando films a Corea y caricaturas de Hong Kong relacionadas a Bruce Lee, como Bong Shin Bong, obtuvieron mucho éxito en el país. La televisión coreana dependería de los dibujos animados extranjeros durante una década más, hasta que en 1987 Corea llegaría a producir su propia serie de caricaturas.

 

En los últimos años, Corea ha incursionado activamente en el campo de la animación tanto tradicional como 3D, mostrando su arte en el mundo con producciones como “La Emperatriz Chung” (2005), “Yobi, la Zorra de Siete Colas” (2007) y “La Taza Viajera” (2007), o bien la serie de dibujos animados “El Sueño de Jang Geum” (2007) basada en la historia de la primera y única mujer en llegar a ser médica personal del emperador, relato que también fue llevado a telenovela con gran éxito en 2003.