Corea del Sur ha estado constantemente comprometida a resolver las tensiones en la península de Corea y allanar el camino hacia la paz.
Como fruto de los incansables esfuerzos y la sincera voluntad del Gobierno de Moon Jae-In, la cumbre intercoreana se reanudó en 2018, tras 11 años de suspensión. Este reencuentro derivó en una notable mejora en la relación intercoreana y permitió sentar las bases de la paz duradera en la península.
El 27 de abril de 2018, Kim Jong-un, presidente del Comité de Asuntos de Estado, cruzó la frontera y se convirtió en el primer líder norcoreano en pisar el suelo de Corea del Sur tras la firma del Acuerdo de Armisticio. Esta reunión celebrada en la Casa de la Paz, situada en el lado surcoreano de la aldea de Panmunjom que divide las dos Coreas, estuvo en el punto de mira del mundo. El presidente Moon Jae-in y su homólogo Kim Jong-un pronunciaron conjuntamente la Declaración de Panmunjom para la Paz, la Prosperidad y la Unificación de la Península de Corea que contiene una serie de acuerdos incluida la desnuclearización completa. Este histórico encuentro dio lugar a un avance trascendental en la relación intercoreana y contribuyó a establecer un régimen de paz permanente en la península de Corea.